martes, 12 de junio de 2012

SULFURO EN HD


Setecientos dos viejos con albornoces sentados con medio pernil de pierna al aire, sentados en silla de mimbre. Una calle divide el pueblo. Casas palaciegas, iglesia, consistorio, y viviendas de madera decapadas por el paso de tiempo, calle arriba. El balneario y tres bares y algo más de diez hostales, calle abajo. El señor Gabino se presta resignado a los saludos de sus paisanos mientras que Granada con su cálido rostro se muestra ufana a los tiernos cuidados de su prole. Su vivienda juguetea entre los recovecos de la pequeña plaza y los muros de piedra de la ladera del monte. Con tres alturas, la casa se distribuye en un entramado de postal donde los balcones buscan denostadamente salir en la foto bien pegadita a la torre de la Iglesia. Dionisio, rostro cuarteado por las horas de sol hace de provisional guía, indica con sus manos marionetas los paisajes a fotografiar.


Spice Girls con pelo en pecho y voz de camionero. Secuencias inconclusas y  consumados planos de artistas venidos a menos. Servicio de ambulancias 24 horas, la píldora del día después la semana que viene por favor. Albergue sondado hasta el techo de la cúpula. Ermitas con cristos yacentes, cristos negros, cristos fumando oraciones de feligreses y feligreses independentistas armando el cristo.

Aquellos dos, Manú y Leandro electrifican el set de rodaje a base de pintar sombras, decorando las luces como antes de una verbena.
Durante esta semana el torneo internacional de ajedrez acapara todas las miradas. Pasamos a un segundo plano. El cine que durante dos semanas tomo la ciudad se refugia entre los enroques de las sesenta y cuatro casillas del tablero.

wILLY lÓPEZ