El hombre del carromato

He decidido sellar mis obras con la firma de Gamero Gil. Es una manera de agradecer el apoyo y cariño que tengo a los que me han traído a este mundo- me dice mi amigo José Manuel en una de esas reuniones esporádicas donde nos ponemos al día de nuestros proyectos conjuntos- Y además- apuntilla- Cada vez que salgo en la prensa me ponen el nombre que les dan en gana, José Jonás, Ginés Javier…-risas y explicaciones de porque me han incluido en su última obra llevando un carromato-No tienes carné de conducir Willy, y no te podía poner a lomos de un caballo- más risas y un sorbo de café.
Así empezó Gamero a darle vida a sus primeros bocetos del que ahora es una realidad. ¿El resultado? Un elegante y a la larga, histórico mural cerámico con el que nos han enriquecido la postal de la ciudad. Un repaso por los cónclaves más señalados de las etapas culturales de Badajoz.
Gamero es un artista que nació en Oliva de la Frontera, cursó sus estudios en Sevilla y está creciendo con pies de plomo en nuestra ciudad. Su condición polifacética del mundo artístico y su miscelánea hacen de sus obras un estilo inconfundible, como sucede con Martínez Giraldo, Adelardo Covarsí o Jani Perigüete.
Te ha quedado muy bien los fondos difuminados del mural, dan dimensión y sensación de profundidad, acertada tu sutileza con los azules de los decorados- le digo con soniquete distendido y señorial al más puro estilo de sus figuras, mientras me enseña las fotos de mi evolución en el mural. Con media sonrisa burlona me confiesa que Lola Chamizo, su fiel escudera en la obra, me ha puesto ojos azules - Espero que la gente lo entienda, espero que se perciban los planos y dimensiones…e incluso tengo un improvisado juglar que cuenta a su manera la historia de la ciudad a los turistas. Pero no les obliga a ponerse las gafas 3D para apreciar colores, formas e ilusiones- risas y sueños entre el humo de su tabaco de liar...